Me llamo Mònica y me apasiona mi profesión.
Para mí, el trabajo con la Logopedia tiene la misma calidad que las otras áreas de mi vida.
Me maravilla cómo el ser humano es capaz de transformar el aliento en palabras.
Palabras que su mente construye, que surgen de su corazón y lo ponen en relación con sus semejantes.